Los imanes pueden ser de dos clases, de Hierro y de acero. Cuando el hierro es imanado, sólo adquiere las cualidades de imán por el tiempo que se le aplica la fuente magnética; el acero, en cambio, una vez imanado, permanece así durante un período de tiempo indefinido. Por consiguiente, los imanes de hierro, se llaman temporarios, y los de acero, permanentes. De cualquiera de estos dos materiales que se hagan, los imanes son de una o dos formas diferens. Unos, en forma de herradura, y los otros, son simples barras. Para los experimentos que detallaremos a continuación, se requieren dos imanes en forma de herradura, y uno sencillo, es, decir, una, simple barra. Ambos se ilustran en la figura 1…

Repítase luego el experimento con un imán en herradura, y se comprobará, que las líneas de fuerza que se formen entre los polos de este, serán más fuertes que las que se formaron antes entre los de la, barra, como se ve claramente en la figura 7. Cómo hacer imanes por contacto Frótese un extremo de una aguja de coser en uno de los polos de un imán, y el otro, en el otro polo. Luego introdúzcase cada extremo de la aguja en un montoncito de limaduras de hierro, y se verá que estas son atraídas por la aguja, la cual se ha convertido en un imán. Un trozo de resorte de reloj puede ser imanado en la misma forma. Cómo se construye una brújula