Quitamanchas

Para quitar manchas deben tomarse varias precauciones.

La primera y más importante y que casi nadie pone en práctica porque cree que es supérflua, es trabajar en una habitación con mucha luz a efectos de poder ver bien las aureolas que se forman.

Otra precaución importante es la de saber elegir el quitamanchas adecuado; por consiguiente deben preferirse los orgánicos, pues atacan menos al tejido que los inorgánicos. En cuanto a los ácidos inorgánicos y los álcalis, hay que emplearlos muy diluidos y tener en cuenta que los primeros atacan a las fibras vegetales y los segundos los animales.

Al emplear un ácido inorgánico, se debe procurar no extenderse, porque al diluir la sustancia que produce la mancha, la agranda. Una vez quitada la mancha, se deben frotar los bordes con un trapo seco y limpio a objeto de que desaparezca la aureola.

Al emplear un ácido inorgánico (por lo general sulfúrico o clorhídrico), se debe humedecer previamente la parte afectada con acetato de sodio.

Como hacer un quitamanchas:

Fig. 1.- Quitamanchas

 

Ahora, a la parte práctica:

Manchas de aceite. — En general, estas manchas, como las de pintura o grasa, se quitan con el siguiente jabón:

La formula de este quitamanchas, es:

Extracto de quilaya, 1 parte; bórax, 1 parte; hiel de vaca, 1 parte; jabón amarillo bueno, 15 partes. Se tritura el bórax con la quilaya, se añade la hiel y se amasa todo. Se hacen barritas.

Se utiliza del siguiente modo:

Se moja la parte manchada y se frota encima, el jabón así preparado. Luego con un cepillito mojado, se cepilla. Por fin se enjuaga con agua.

Manchas de ácido. — Son muy difíciles de quitar y sólo se logra cuando son frescas y no intensas, pues destruyen el tejido. Y la forma de emplear este quitamanchas es:

Se le echa un poco de amoníaco encima, de la mancha y luego se frota con cloroformo.

Manchas de ácido pícrico. — Se moja la mancha y se le echa un poco de carbonato de litio. Es éste un procedimiento sumamente efectivo. Las recientes desaparecen casi en el acto y las antiguas á los pocos minutos.

Hay otra fórmula quitamanchas, que consiste en el uso del ácido bórico y benzoato de sodio en la proporción de 4 partes del primero por 1 del segundo, disuelto en 300 partes de agua.

De barniz. — Sobre tejido, ya sea dé lana, hilo o algodón, se comienza por utilizar, aguarrás rectificado, luego alcohol, lejía de soda diluida y por último jabón.

En cambio si es sobre seda, debe emplearse bencina, éter y jabón bueno.

Qitamanchas de brea, alquitrán. — Primero se moja la tela, luego se le empapa, de aguarrás y se deja un par de minutos. Antes de que se seque, se vuelve a mojar con aguarrás, se pone un secante limpio debajo y otro sobre la mancha y encima se le pasa una plancha caliente. Por lo general requieren varios tratamientos. Por fin, se lava con jabón y agua caliente. ,

Si estas manchas son ya viejas, conviene el siguiente tratamiento:

Se le aplica una mezcla de grasa y jabón. A los cinco o diez minutos se comienza a tratar primero con aguarrás y luego con agua caliente. Se debe obtener todo este tratamiento varias veces.

Si no desapareciera, se procede así: Se cubre la mancha con yema de huevo mezclada previamente con aguarrás. Cuando se ha secado, se rasca y le lava muy bien con agua caliente; finalmente se le da un lavaje con agua que contenga un poco de ácido clorhídrico y se termina con un lavaje a fondo con agua pura.

Hay que tener siempre la precaución de no frotar a contrapelo.

Quitamanchas de Café, te y leche.— Estas manchas son a veces rebeldes de quitar si se han secado y el tejido es delicado. Nunca debe emplearse en primer término el jabón, pues éste refuerza el tono de la mancha.

Se mezclan 5 partes de glicerina con 5 de agua y 1/4 de amoníaco.

Se prueba un trocito de tela para ver si no pierde el color. Si sucediera esto, se debe suprimir el amoníaco.

Se aplica con un cepillo suave. Se deja 5 ó 6 horas y luego se frota con un paño limpio. Luego se lava con agua, se comprime entre dos telas y se seca. Si no desaparece, se frota con miga de pan.

Otras veces, las manchas salen poniendo la parte afectada en una palangana, se le echa un poco de agua caliente, se la restriega con bórax, se le echa más agua caliente, y se deja en remojo varias hora.

Claro está que este último tratamiento sólo se emplea cuando el tejido es resistente.

quitamanchas de fruta. — Las frutas manchan y atacan los colores de los tejidos con bastante intensidad. Sin embargo, por lo general desaparecen sin dejar rastros lavándolas, antes de que se sequen, con agua que contenga un poco de amoníaco.

quitamanchas de hierbas. — Desaparecen fácilmente aplicándoles éter que disuelve la clorofila.

quitamanchas de nitrato de plata.— Casi todas las fórmulas para atacar las manchas de nitrato de plata propuestas hasta la fecha, son de base tóxica y muy violentas por añadidura.

He aquí una que, si bien no es tan activa, no tiene los peligros de las anteriores.

Sulfito sódico, 2 partes; cloruro cálcico, 1 parte, y agua, 4 partes.

Se aplica con un cepillito de uñas frotando enérgicamente.

Manchas de hierro.— Se mezcla una parte de ácido oxálico con dos de crémor tártaro. Un poco de estos polvos se aplica sobre la mancha previamente mojada. Se deja un rato y por fin se enjuaga con agua.

Manchas de tinta.—Se disuelve en 16 partes de agua destilada, 1 parte de acido cítrico y 2 de solución concentrada de bórax. Se agita bien y se aplica.

Otra forma es colocar la parte manchada en leche.

Se deja durante un cuarto de hora y se enjuaga bien. Se repite la operación varias veces hasta que ha desaparecido totalmente. Claro está que cuanto más pronto se trate la mancha, mejores serán los resultados.

Este tratamiento es recomendable para los tejidos más finos, pues no ataca el color ni destruye el tejido

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